Algunas claves para introducir la coeducación en el aula de infantil

In Noticias Educar en Igualdad by Educar en Igualdad

Por Petra Godoy Viera – Voluntaria de Fundación Mujeres


Coeducación es sinónimo de igualdad, en educación infantil, se trata de una igualdad amplia, ya que cada actividad puede llevar a valorar diferentes aspectos que repercuten en ésta.

Para que los cambios tengan un buen resultado tiene que participar toda la sociedad, es decir desde la familia y el profesorado, promoviendo cambios profundos, basados y constatados por profesionales para que sean perdurables en el tiempo, elevando el nivel de conciencia y avanzando en su desarrollo. Los estereotipos de género están tan inmersos en nuestra sociedad que es imprescindible la inclusión constante de actividades que eliminen esas creencias.

Este breve artículo trata de trasladar algunas condiciones imprescindibles para una educación coeducativa, siguiendo las pautas principales del Departamento de Igualdad de la Consejería de Educación del Gobierno de Canarias.

Basándolas en estos tres objetivos, compartimos algunas claves o actividades que respetan los principios de la coeducación en el ciclo de infantil:

  1. Comunicación y resolución no violenta de conflictos: La sociabilidad es uno de los factores más importantes en el desarrollo infantil. Como seres sociales los niños y las niñas están influenciados por lo que viven, por ello, es importante cuidar esos primeros años estableciendo pautas de conducta desde  el respeto, la aceptación y validación de sus emociones. Un ejemplo podría ser: Role Play. Se coloca a una pareja en dos sillas enfrentadas, a cada uno/a se le entrega un dibujo (de oreja o de boca). Este conflicto entre dos, lleva a que se respete el escuchar mientras está en la silla de la oreja y el hablar mientras está en la silla de la boca. Expresan y escuchan, dos habilidades que empiezan a desarrollar desde el respeto al otro u otra con una escucha activa.
  2. Superar estereotipos de género: Las actividades que programemos deben tener implícita la libre elección para ambos sexos, estando atentas y atentos a cualquier actitud de discriminación, evitando ciertas frases como: “Los niños no lloran” o “Tienes que ser fuerte” (a los niños) y “Tú no puedes…pesa mucho” o “Tú corres menos” (a las niñas). Buscar validar la emoción del niño y por otro lado la capacidad de la niña.
  3. Lenguaje inclusivo y no sexista: Las palabras son el motor que permite transmitir los relatos que expresan las experiencias y pensamientos que se tienen. El narrar, por ende, es sentimiento y pasión, es la configuración del entorno y del ser. El que tiene poder sobre la palabra posee el dominio sobre el mundo y su creación.(Luis Enrique Ferro Vidal).

Para más información consulta los siguientes enlaces:

Si te interesa este contenido, ¡compártelo!