Hace unos días nos llegaba al equipo técnico educativo de Fundación Mujeres una pregunta: ¿qué os parecen los Ksi-meritos?
Ante la misma, mis compañeras, Sandra, Teresa y yo, nos pusimos a investigar y descubrimos que se trata de un muñeco que hasta hace poco sólo se comercializaba en América y que, al parecer ha aterrizado con fuerza en España. Según Maika Ávila, la periodista de Cadena SER que contacta con nosotras por el reportaje que está realizando sobre este tema, está prácticamente agotado y es el «regalo estrella» para niñas. Sí, niñas. Los niños no entran en la ecuación de los cuidados.
Parece que la campaña, centra los esfuerzos en visibilizar esta tarea atendiendo a roles y estereotipos heteropatriarcales, con niñas hipersexualizadas y en la que no aparece ni un solo niño cuidador. Para ver a un hombre, tenemos que esperar a que aparezca el Dr. Chui, figura de poder y conocimiento, a quien Tania, la enfermera que cuida del ksi-merito, acude solicitando ayuda para que investigue de dónde vienen los ksi-meritos, en un momento en el que no se sabe si es que ella no puede, porque tiene que atender al muñeco o, no tiene habilidades para ello.
Estos roles, los de Tania y el Dr. Chui, no están alejados de la realidad en las relaciones de poder y desigualdad, incluida la representación de los oficios masculinizados y feminizados, doctor y enfermera.
El juego simbólico es una representación de la realidad que realizan niños y niñas, teniendo gran influencia sobre el desarrollo de la personalidad. Cuando jugamos, también estamos aprendiendo lo que se espera de nosotras y nosotros y cómo desenvolvernos socialmente.
Por Raquel Gallego Vega, Sandra Gómez Fresneda y Teresa García del Vello Moreno. Técnicas de educación y prevención de violencia de género de Fundación Mujeres.